El Grabado en linóleo deriva de la xilografía y su aparición se remonta a principios del S.XX.
Esta técnica pertenece al grabado en relieve, que se refiere a los procedimientos por los cuales las matrices están talladas en profundidad, de tal manera que las diferencias de altura entre unos y otros elementos en la plancha, pueden superar el milímetro. Por lo que al contrario de lo que sucede en el grabado en hueco , en el papel aparecerán entintadas las zonas que no se tallaron, y las zonas que se quitaron de la matriz serán el blanco. Esta técnica nos permite utilizar zonas homogéneas de color con tintas planas.
Las herramientas utilizadas para la talla son las gubias, que con sus diferentes embocaduras, nos permiten retirar más o menos masa de material en la plancha, al mismo tiempo que nos generan diferentes trazos.
La base del linóleo o linóleum es una plancha que se compone de una mezcla amasada de blanco de España con aceite de linaza prensada sobre arpillera. En su origen se utilizó como recubrimiento para los suelos de las viviendas.
Actualmente el linóleo también se obtiene de una pasta formada por aceite de linaza oxidado, que se mezcla con resinas y materiales de relleno como corcho o serrín, con el cual se impregna un tejido alquitranado. Por oxidación y desecación de este cemento se obtiene una masa compacta de una cierta elasticidad, muy resistente a los agentes atmosféricos.
Proceso para grabar plancha
(En este caso utilizo Pvc como matriz y no linóleo pero es el mismo procedimiento)
1.-Prepararemos el dibujo elegido para ser grabado, del mismo tamaño que la plancha. Esta técnica trabaja zona de masas planas en negro sobre fondo blanco bien contrastado evitando aguadas y medios tonos.
Para traspasar el dibujo a la plancha, utilizaremos papel de calco sobre el linóleo y encima de éste el dibujo a realizar invertido (muy importante).
Personalmente recomiendo solo calcar las zonas en blanco, que serán posteriormente las que eliminaremos del linóleo.
2.-Una vez pasado el dibujo a la plancha, procederemos a tallar el linóleo, con la gubias, estas son herramientas usadas principalmente para la talla en madera, y su característica principal estriba en la diversidad de sus puntas, en función del tipo de sustracción que vayamos a realizar en cuanto a forma, grosor y cantidad.
Para realizar el tallado tenemos de referencia el dibujo original, puesto que iremos eliminando las zonas que se corresponden con el blanco de la imagen final.
* La mano que sostiene la herramienta ha de estar siempre delante de la otra, para evitar cortarnos y que se nos mueva la plancha.
Una vez finalizado el tallado de la plancha, procederemos a realizar la primera prueba, el gofrado. En la que pasaremos el linóleo por el tórculo sin entintar con un papel, produciendo una estampa sin color, pero con relieve.
3.-Después se procede a la prueba de estado, entintando la plancha de linóleo, con tinta calcográfica y un rodillo de caucho de manera uniforme. Así realizaremos la primera estampa, que nos dejará comprobar si la plancha esta perfecta o hay que hacer algún retoque.